Antes de nada, quiero aclarar que en este post no voy a hablar del derecho al aborto. Quiero hablar de parir, de parir y de decidir. Todas hemos oído esta frase de «nosotras parimos, nosotras decidimos» asociada a la interrupción voluntaria del embarazo. Pero parece que hasta ahí llega nuestro poder de decisión, seguir con un embarazo o no. Cuando decides parir ya no decides nada.

¿Qué pasa cuando nos quedamos embarazadas?

De repente una mujer sana, libre y mayor de edad. Una mujer que era capaz de tomar sus propias decisiones, de decidir en qué quiere invertir su tiempo, a qué quiere dedicarse, si tenía pareja o no… Todas esas decisiones, de alguna manera que aún no entiendo, pasan a ser de dominio público. Todo el mundo te da consejos ya cuando estás embarazada, de repente tú ya no tienes derecho a decidir nada.

El trato paternalista es la tónica de las relaciones que mantienes con otros adultos. Parece que por estar embarazada tienes una especie de regresión a la infancia, donde ya todas tus decisiones (por muy conscientes e informadas que sean) tienen que ser auditadas por el resto del mundo. 

Si te atreves a salirte un poco de la corriente dominante en tu cultura ya sabes lo que te espera.

  • Si decides parir en casa eres temeraria
  • Si no quieres una cesárea innecesaria estás poniendo en riesgo la vida de tu hijo por un «capricho» (olé ahí, ¡con un par!)
  • Si lo que buscas es que te traten como a una persona adulta es que te molestas por todo… En fin…

Siempre habrá a quién le moleste que las mujeres nos salgamos de nuestro sitio, en el que tenemos que ser buenas y obedientes. Ese sitio en el que tenemos que hacer caso a lo que nos digan porque, al fin y al cabo, nosotras qué sabemos.

No quiero entrar a hablar de la violencia obstétrica porque eso da para un libro, pero ya está bien. Ya está bien de tratar a las mujeres como si fuéramos estúpidas.

Cuando por fin nace tu bebé, la cosa no mejora mucho, especialmente si eres primeriza. Quiero pensar que si tienes 10 hijos la gente se corta un poco… Aunque visto lo visto, igual tampoco.Para muestra una publicación de Instagram de Verdeliss, madre de seis.

 

 

– Eres como un juguete más que da leche – Parece un surtidor – Basta de la secta proteta – Este tema empieza a ser enfermizo – Me parece una aberración – Muy desagradable – Deberías cortarlo ya – Es mala crianza que te estén sacando y toqueteando la teta – Resulta grotesco ver a niñas de ese tamaño estar mamando – Cogen el pecho de chupete, no por hambre – Esa leche ya no aporta nada, será aguachirri – Son adictas a las tetas – Eso no es alimentación, es un vicio – Te recomiendo ir a un profesional y hacer lo que es bueno – Le puede afectar hasta psicológicamente – Qué asco – No somos vacas, somos mujeres – Crean un apego negativo en este tipo de niños – La lactancia se te fue de las manos – Este ya es mal ejemplo – Te chupan todos los nutrientes, manda esas chiquillas a tomar leche de vaca – Mejor implántate pechos —————————————————————————-Anne, 21 meses y lactancia materna a demanda. Por si no era suficiente, su hermana, Eider, también obedece al comportamiento para el que la naturaleza la ha progamado. Éste es sólo un pequeño extracto de los comentarios a mi último vídeo…y por momentos pensaba tener dos misiles nucleares en vez de dos tetas. Por qué ofende tanto esta estampa? Más bien: por qué horrorizada un bebé «grande» lactando? De qué tenemos miedo? Acaso el exceso de amor, cobijo, confort fue en algún momento peligroso? En qué mundo vivimos que se empeña en criminalizar vínculos, desapegarnos de nuestras crías. ❌NO, no es un debate de lactancia materna vs lactancia artificial❌ #BastaDeJuicios #BastaDeMitos #LactanciaMaterna

Una publicación compartida de verdeliss (@verdeliss) el

Nosotras parimos , no nos paren

Desde aquí os quiero transmitir a todas que por mucho que os hagan sentir idiotas no lo sois, que sois valientes y válidas. Y que os informéis, la información es poder. Tenemos la suerte de contar con muchísimas mujeres maravillosas que han recorrido este camino antes que nosotras y que nos lo han allanado un poquito. 

Si estáis embarazadas visitad el Parto es Nuestro, vais a encontrar muchísima información científica, clara y bien explicada. 

Si ya tenéis un bebé, pues a empoderarse mucho. Seguro que conocéis a Nohemi Hervada, pero si alguna no la conoce no os la podéis perder.

Escuchad vuestro instinto, conectad con vosotras mismas, encontrad buenas amigas y contad con ayuda profesional si la necesitáis. Una buena asesora de porteo, de lactancia, una doula, una Asesora Continuum… 

No se trata de no equivocarse, claro que no. Como decía mi bisabuela «No me des consejos, que ya se equivocarme sola»

Equivócate y rectifica. No pasa nada. Pero no dejes que otros se equivoquen por ti.